Cómo trabaja WFP a través de las fronteras para proteger y mejorar la seguridad alimentaria de las comunidades de la región conocida como "el pulmón de la tierra".
Historia de Cipriana Hernández y el vivero comunitario de Chex Abajo, Guatemala, una comunidad siembra esperanza a través de un vivero que impulsa seguridad alimentaria, liderazgo femenino y resiliencia.
En el Corredor Seco de Guatemala, el Programa Mundial de Alimentos (WFP) impulsa la resiliencia comunitaria frente al cambio climático mediante sistemas de riego eficientes que han transformado la producción agrícola. Gracias al apoyo técnico y la colaboración con actores locales, más de 300 personas hoy cultivan alimentos de forma sostenible, fortaleciendo su seguridad alimentaria y autonomía económica. Esta experiencia demuestra que, con acompañamiento y tecnología adecuada, incluso los territorios más áridos pueden florecer y avanzar hacia el Hambre Cero.
En Guatemala, un grupo de mujeres está marcando la diferencia en la lucha contra la inseguridad alimentaria. Con una mochila al hombro y unos zapatos resistentes, estas consejeras comunitarias nutricionales recorren zonas rurales remotas para compartir conocimientos que transforman vidas.
El Programa Mundial de Alimentos (WFP, por sus siglas en inglés) acompaña a mujeres en zonas costeras, rurales e indígenas, a fortalecer habilidades y conocimientos en oficios que son relevantes en sus comunidades. En estos espacios ellas se conocen mejor, comparten saberes e ideas, se acompañan y fortalecen la confianza en su propio potencial.
En Honduras, un grupo de mujeres convierte el reciclaje de metales y plásticos en una fuente de ingresos para recuperarse de las secuelas de los huracanes Eta e Iota
Comunidades afrodescendientes e indígenas awá se consideran parte integral del ecosistema de los manglares en la frontera. Con apoyo del Fondo de Adaptación y WFP protegen su hogar y medios de vida.
Con motivo del Día Internacional de los Pueblos Indígenas, tres funcionarias de WFP comparten sus experiencias de trabajo con las comunidades en Colombia
Mientras WFP apoya a las comunidades en una zona de Bolivia afectada por la sequía, una joven líder indígena espera que sus compañeros se queden en la tierra de sus antepasados
Comunidades en 11 municipios desarrollan un plan de respuesta ante una posible erupción en el complejo volcánico San Cristóbal con el apoyo de las autoridades y del Programa Mundial de Alimentos
Una nueva panadería está brindando pan fresco, empleo e ingresos para las mujeres en una comunidad indígena como parte de un proyecto de resiliencia a la crisis climática
Un proyecto en el Corredor Seco busca que pequeños productores y productoras mejoren sus medios de vida para así hacerse resilientes al impacto de las repetidas crisis climática y los vaivenes de la economía
Dos huracanes destruyeron los medios de vida de los pescadores garífunas, pero sus esposas se organizaron para suplir la pérdida de dinero (pisto, en Honduras) horneando y vendiendo su tradicional pan de coco
Las mujeres de una comunidad guatemalteca pasaban extenuantes horas de trabajo para conseguir agua, pero un aljibe comunitario ha mejorado su situación
Presentamos estas historias que recogen parte del trabajo que llevaron a cabo tanto personas como comunidades con el Programa Mundial de Alimentos durante este año
Dos comunidades afrodescendientes en los territorios más apartados del país fortalecen su seguridad alimentaria, su resiliencia y su autonomía con la crianza de gallinas ponedoras
En el altiplano boliviano, a 3.800 metros de altura, la crisis climática amenaza la supervivencia de los urus, una comunidad indígena, pero hay esperanza