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Cada vez que el Programa Mundial de Alimentos (WFP) implementa transferencias de efectivo, los expertos en la cadena de suministro participan desde el principio.

¿Consiguen las personas a las que apoyamos con asistencia en efectivo el mejor rendimiento por su dinero? ¿Son capaces de cubrir sus necesidades alimentarias básicas, o los precios de las tiendas son demasiado altos debido a cadenas de suministro ineficientes o interrumpidas? ¿Está protegida la calidad de los alimentos que compran? ¿Puede el sector minorista satisfacer la demanda adicional generada por nuestras transferencias en efectivo, mes tras mes? ¿Hay suficientes alimentos nutritivos disponibles durante todo el año?

Combinando décadas de experiencia en la entrega de asistencia alimentaria con creatividad y agilidad para elaborar las respuestas más apropiadas a necesidades que cambian rápidamente, el personal de la cadena de suministro de WFP trabaja para garantizar que las personas a las que servimos reciban el tipo de asistencia que mejor se adapta a ellas dentro del contexto local.

WFP reconoce que no hay una solución única para todos. En algunos casos, trabajamos con minoristas seleccionados, donde los beneficiarios pueden comprar los alimentos que prefieren. En otros, optamos por el dinero en efectivo sin restricciones, lo que permite a los beneficiarios decidir cómo, dónde y cuándo comprar lo que necesitan para sus familias.

WFP lanza una variedad de evaluaciones de diferentes sectores, como el comercio minorista, las finanzas y la tecnología, para elegir la herramienta adecuada (ya sea efectivo, cupones o tarjetas electrónicas) para cumplir los objetivos programáticos en el contexto local.

En las áreas donde operamos, estudiamos las condiciones del mercado minorista local, las redes de la cadena de suministro, los precios y los posibles cuellos de botella o ineficiencias que podemos ayudar a eliminar.

Ayudamos a mayoristas y minoristas seleccionados a planificar con antelación para evitar posibles cortes de suministro y negociar mejores precios con proveedores y transportistas. Trabajamos en toda la cadena de suministro con el objetivo más amplio de mejorar la gestión minorista en los mercados locales y garantizar que nuestros beneficiarios tengan acceso a alimentos de buena calidad que estén siempre disponibles en stock y a precios justos. Ayudamos a los minoristas a gestionar mejor sus inventarios, comprar sus existencias y organizar el transporte y el almacenamiento, de modo que puedan ofrecer el mejor servicio posible a todos los clientes de las tiendas contratadas por WFP. Juntos, aplicamos soluciones empresariales a los problemas humanitarios.

Si bien nos centramos en cómo apoyar mejor a las personas a las que servimos, nuestro trabajo para fortalecer las cadenas de suministro minoristas ayuda a comunidades enteras que compran en las mismas tiendas. Una vez que finalizan nuestras operaciones, dejamos atrás un sector más sólido, sostenible y competitivo, donde hay alimentos nutritivos disponibles, mes tras mes, a precios asequibles y las familias pobres cosechan los beneficios de la eficiencia de la cadena de suministro.