En el Día Mundial de Lucha contra la Desertificación y la Sequía (17 de junio) damos en vistazo a los urus, cuyas comunidades luchan por superar los efectos de la crisis climática
El efecto dominó causado por el conflicto en Ucrania, el impacto socioeconómico de la pandemia, y la crisis climática, están aumentando la inseguridad alimentaria y los movimientos migratorios en la región
Andreina Rincón es la jefa del almacén de Coro, en el estado Falcón, desde donde se distribuyen los alimentos para unas 43.000 personas, entre estudiantes y personal, en 321 escuelas de educación inicial y especial
Una integrante del equipo de Logística del WFP rememora su participación en una simulación junto a 50 participantes de 16 países en la cordillera de los Andes
Beinilet Salas utiliza los alimentos del Programa de Comidas Escolares del WFP para preparar platillos como el atol y el arroz con leche, este último el preferido de su hija de tres años.
Los pueblos originarios protegen el medio ambiente como parte de su cosmovisión. No contribuyen al cambio climático, pero sufren como todos las consecuencias.
El Programa Mundial de Alimentos necesita US$8 millones para brindar asistencia alimentaria urgente mientras el país se recupera de una de las peores tormentas desde 1998.
41.000 personas en 9 países* respondieron a una encuesta remota sobre cómo la COVID-19 ha afectado sus medios de vida, seguridad alimentaria y acceso a mercados.