Las comidas escolares del Programa Mundial de Alimentos hacen la diferencia para dos hermanos con necesidades especiales
Los hermanos Omar (9) y Richard (4) tienen Glucogenosis tipo 3, un trastorno neuromuscular. Ambos asisten a la Escuela de Educación Especial Valmore Rodríguez en el estado Trujillo.
Hoy están en la escuela con su madre Yolabel Viloria para recoger sus raciones mensuales. El Programa Mundial de Alimentos está entregando kits de alimentos a más de 5.000 estudiantes y a unos 2.552 empleados en escuelas de educación especial en los estados Falcón, Trujillo, Yaracuy y Barinas.
Mientras esperaba en la fila, Yolabel habló sobre sus hijos y los desafíos que enfrentan. En el caso de Omar, tenía dificultad para gatear cuando tenía solo 8 meses y años después tuvo que ser intervenido quirúrgicamente porque empezó a caminar de puntillas.
Como los padres de Yolabel viven a un par de calles de su escuela y la movilidad es un problema, los niños se quedan con ellos durante los días de escuela y ella viene a visitarlos. Pero Yolabel también recibe otro tipo de apoyos.
“Gracias al esfuerzo del papá de ellos y mis padres, ellos consumen leche y huevos, y una o dos veces a la semana lo que es pollo y carne. Pero fíjate que ya uno con las lentejas aprende a preparar muchas cosas como las albóndigas”, dijo Yolabel.
La alimentación que entrega el WFP está destinada a cubrir las necesidades calóricas de los niños durante un mes, y consta de 6 kg de arroz, 4 kg de lentejas, 1 libra de sal yodada y 1 litro de aceite vegetal.
Yolabel explicó que esta canasta de alimentos es de mucha ayuda. “Muchas veces uno puede adquirir los productos, pero no puede comprar el aceite y las lentejas porque son costosas. Las lentejas tienen muchas vitaminas, tienen proteínas que nos benefician”, agregó.
Para los niños con discapacidades, es importante comer alimentos nutritivos y saludables, incluidas frutas y verduras.
En julio de 2021, WFP inició operaciones en Venezuela con el lanzamiento de un programa de comidas escolares en el estado Falcón. A principios de 2022, WFP amplió sus operaciones a los estados Yaracuy, Barinas y Trujillo con el objetivo de llegar a más de 1.000 escuelas de preescolar y educación especial.