Cómo trabaja WFP a través de las fronteras para proteger y mejorar la seguridad alimentaria de las comunidades de la región conocida como "el pulmón de la tierra".
El río Orinoco es el hogar de una de las poblaciones indígenas más antiguas y numerosas de Venezuela. El Programa Mundial de Alimentos (WFP, por sus siglas en inglés) tiene allí uno de sus más amplios y desafiantes programas en el país. Una ingeniería logística que no deja a nadie atrás.
El Programa Mundial de Alimentos (WFP, por sus siglas en inglés) acompaña a mujeres en zonas costeras, rurales e indígenas, a fortalecer habilidades y conocimientos en oficios que son relevantes en sus comunidades. En estos espacios ellas se conocen mejor, comparten saberes e ideas, se acompañan y fortalecen la confianza en su propio potencial.
En Venezuela, las familias en las que hay una persona con discapacidad tienen que tomar decisiones difíciles cada día: medicinas o comida, educación o comida. El programa de comidas escolares de WFP intenta cambiar esta situación.
Las comidas escolares de WFP en Venezuela alimentan el sueño de Charlotte, ser bailarina, y el de su madre, Frangil: “que sea profesional, que logre grandes cosas”.
Cocineras y maestras celebran la renovación de la cocina de su escuela y el hecho que las niñas y los niños puedan comer comidas calientes y saludables. Al igual que esta escuela, el Programa Mundial de Alimentos rehabilita las cocinas escolares en ocho estados del país.
Navegando el rio Orinoco en Delta Amacuro, tierra warao, con un programa de comidas escolares. El inicio de un viaje de mil preguntas para WFP en Venezuela.
Dos mil kilómetros en carro, 10 horas en chalupa, lodo, lluvias. Seiscientos estudiantes esperaban nuestras primeras comidas escolares en Arismendi, uno de los municipios de más difícil acceso en Venezuela. Esta es la historia.
Andreina Rincón es la jefa del almacén de Coro, en el estado Falcón, desde donde se distribuyen los alimentos para unas 43.000 personas, entre estudiantes y personal, en 321 escuelas de educación inicial y especial
Beinilet Salas utiliza los alimentos del Programa de Comidas Escolares del WFP para preparar platillos como el atol y el arroz con leche, este último el preferido de su hija de tres años.
El Programa Mundial de Alimentos lanzó su programa de comidas escolares en Venezuela, realizando las primeras distribuciones de raciones para llevar a casa en el estado Falcón.