Guatemala: Educación financiera empodera a mujeres indígenas
"En el grupo hacemos préstamos a las mismas compañeras y pagan un interés cada semana por el préstamo", comenta Herlinda Caal Tzi mientras verifica que uno de sus cerdos tenga agua y comida en el corral.
Herlinda es la presidenta del Comité de Empoderamiento de Ahorro y Crédito de la comunidad Corazón de Maíz, ubicada en el municipio de Panzós, en la región del Valle del río Polochic, departamento de Alta Verapaz.
Más de 4,200 hectáreas de cultivos en 15 municipios en este departamento fueron afectados por las poderosas tormentas tropicales Eta e Iota, según el gobierno. Se estima que el 40% de la población en Alta Verapaz estaría en situación de inseguridad alimentaria aguda durante el período de noviembre 2020 a marzo 2021, de acuerdo con la Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria en Fases (CIF).
Los efectos de la pandemia
Herlinda cuenta que los esposos de las mujeres del grupo perdieron sus trabajos durante la pandemia y no podían salir a trabajar por el estado de calamidad en el que se encontraba el país. El grupo de mujeres decidió vender algunos cerdos para comprar insumos agrícolas como fertilizante, insecticida y herbicida.
El Programa Mundial de Alimentos (WFP por sus siglas en inglés), ha capacitado a las mujeres en la metodología de ahorro y crédito, y les ha brindado asistencia técnica para la implementación de sus actividades productivas.
Gracias al resultado del trabajo de las mujeres y el apoyo financiero parcial del WFP, ellas compraron una pequeña desgranadora de maíz que les permitió ofrecer el servicio para desgranar las mazorcas de maíz a las personas de la comunidad. Continuaron ahorrando y compraron una desgranadora más grande durante el 2020.
"Antes no teníamos ahorrado ni un centavo, pero cuando tenemos alguna necesidad, prestamos en el grupo y ya solventamos las necesidades en nuestro hogar", agregó sonriente antes de iniciar su reunión.
Actualmente el grupo de ahorro y crédito está conformado por 12 mujeres q'eqchies. Desde el 2016, este grupo de mujeres ha desarrollado diferentes actividades productivas como la crianza de gallinas ponedoras, cerdos, siembra de maíz y ahora el servicio de desgranar maíz.