“FRIJORICO”, la marca de frijoles orgánicos producidos por mujeres
30 mujeres se llevan las palmas con su emprendimiento "Del campo a su mesa"
, Sabrina Quezada
¿Qué mejor alimento que un rico plato de frijoles rojos? Son muy sabrosos, nutritivos y brindan muchos beneficios para la salud. Las pequeñas productoras de La Concordia, Nicaragua tienen mucho que aportar: frijoles orgánicamente producidos y vendidos ya procesados.
"FRIJORICO" es el nombre del producto que 30 pequeñas agricultoras de granos básicos están vendiendo en el mercado local después de darle valor agregado a los frijoles rojos. Ese valor agregado consiste en cocer y empacar al vacío los frijoles en la planta de la Cooperativa Agropecuaria de Crédito y Servicio "Blanca Aráuz", de Jinotega, en el norte de Nicaragua.
Los frijolitos listos para consumir vienen en bolsas de 30 onzas, casi dos libras. El producto se vende en pulperías (pequeñas tiendas generalmente ubicadas en casas de habitación), ferias y negocios de venta de alimentos preparados. Su lema, "Del campo a su mesa" invita a degustar un rico plato de saludables frijoles rojos producidos sin contaminar el medio ambiente.
El valor agregado del "FRIJORICO"
Treinta de las 367 pequeñas productoras de granos básicos socias de la cooperativa cultivan y procesan el "FRIJORICO". La idea surgió en las reuniones de trabajo que sostenían para elaborar el plan estratégico de la organización.
"Este proyecto beneficia a las mujeres porque el frijol cocido tiene 50% más de rendimiento. Por ende, al darle valor agregado al frijol que sembramos, recibimos mayores ingresos al momento de venderlo,", explicó María Auxiliadora Rivera, Presidenta de la Cooperativa "Blanca Aráuz".
Las agricultoras se propusieron además implementar sistemas de cultivo completamente orgánicos en sus parcelas para hacer uso racional de los recursos naturales. Mientras crecían las matas de frijoles, la cooperativa instalaba plantas de procesamiento para frijoles crudos y cocidos.
El Programa Mundial de Alimentos (WFP, por sus siglas en inglés) colaboró con las productoras de La Concordia para desarrollar esta iniciativa que les permite contar con un sistema alimentario que produce, nutre y es sostenible, gracias al financiamiento de la Unión Europea como parte del Programa "Impulsando la Seguridad Alimentaria y Nutricional a través de la Resiliencia Económica".
"FRIJORICO: Del campo a la mesa", es una oportunidad en momentos en que la COVID-19 ejerce una fuerte presión sobre la agricultura a nivel mundial y producir alimentos sanos y nutritivos es cada vez más urgente en la respuesta ante la pandemia. La cooperativa asumió el reto y pese a las dificultades, las socias continúan cultivando, cosechando, procesando, cociendo, empacando y vendiendo frijoles, cumpliendo con las normas de bioseguridad para protegerse del virus.
Uno de los enfoques estratégicos del programa que desarrollan WFP y la Unión Europea con las organizaciones de productores y productoras en Nicaragua es fomentar el empoderamiento económico de las mujeres como una vía para lograr la equidad de género.
"Nos sentimos muy orgullosos del emprendimiento de las pequeñas productoras de la Cooperativa Blanca Aráuz. Su iniciativa y esfuerzo por llevar adelante su proyecto representan una inspiración para otras mujeres nicaragüenses que luchan por alcanzar sus sueños y las metas que se proponen", expresó la Representante del WFP, Giorgia Testolin, al visitar el centro de procesamiento de frijoles.
Legumbres orgánicas y saludables
El frijol es la legumbre más consumida en Nicaragua. Contiene altos niveles de proteínas, vitaminas, minerales esenciales y antioxidantes. Entre sus beneficios se mencionan la protección contra enfermedades del corazón, diabetes y cáncer.
Al cultivar orgánicamente, las productoras de La Concordia no emplean pesticidas, fertilizantes ni otros aditivos sintéticos. De esta manera, evitan contaminar el suelo, el agua, el aire y protegen su salud y la salud del consumidor.
Quien compra "FRIJORICO", consume, además productos más saludables. Estudios realizados a nivel mundial indican que los alimentos que son cultivados orgánicamente tienen niveles más altos de nutrientes frente a los cultivados con productos sintéticos.
"En "FRIJORICO" vemos el gran papel que juegan las mujeres en los cambios económicos, sociales y en la protección del medio ambiente. Agradecemos a la Unión Europea, uno de los más importantes socios en el trabajo de WFP, por acompañar a las mujeres rurales en iniciativas que les permiten avanzan con pasos decididos en su hogar, en su comunidad y en su organización", señaló Testolin.
WFP acompaña los esfuerzos nacionales para que las mujeres, niñas y adolescentes tengan mayor acceso a educación, salud, nutrición, bienes productivos, crédito, información, tecnología, así como todo bien y servicio que fomente la igualdad de género.
Si encuentra "FRIJORICO", ¡cómprelo! Es una oportunidad para aportar al empoderamiento económico de las mujeres emprendedoras de La Concordia, comer sanos y poner su huella en la protección de nuestro planeta.
