El Programa Mundial de Alimentos ampliará operación de emergencia a 700.000 personas en Haití
Uno de cada tres haitianos, o sea 3,7 millones de personas, necesita asistencia alimentaria urgente, incluyendo a 1 millón que sufre de hambre severa, según reveló un estudio a nivel nacional realizado en agosto por el Gobierno de Haití con el apoyo del WFP y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
“Las familias haitianas pobres enfrentan una situación muy dramática. WFP y nuestros socios estamos haciendo todo lo posible para llegar a un número creciente de personas vulnerables con asistencia de emergencia", dijo Miguel Barreto, Director Regional del WFP para América Latina y el Caribe, quien se encuentra en misión en Haití del 5 al 7 de diciembre.
El aumento de los precios, la depreciación de la moneda local y la caída de la producción agrícola han golpeado duramente a millones de haitianos. Las protestas y disturbios callejeros en los últimos tres meses bloquearon muchas carreteras, restringiendo aún más el acceso a los alimentos para los hogares más pobres. Una leve mejora en la seguridad permitió la entrega de asistencia alimentaria a familias, la cual estuvo interrumpida desde septiembre.
En las últimas tres semanas, casi 23.000 personas han recibido asistencia alimentaria de emergencia en el departamento de Nord-Ouest, definido por el informe del Gobierno como el de mayor inseguridad alimentaria del país. WFP proporciona a las familias alimentos suficientes para un mes.
WFP está también ampliando las distribuciones y la provisión de efectivo y cupones a otros departamentos afectados por la inseguridad alimentaria. En noviembre, 67.000 personas recibieron dinero en efectivo para que, a medida que los mercados se recuperan, puedan comprar sus alimentos en los comercios locales. En lo que va de 2019, WFP ha suplido las necesidades alimentarias de 138.000 personas en todo el país. Nuevas distribuciones serán organizadas cuando la situación de seguridad lo permita.
Los disturbios han afectado los esfuerzos de las organizaciones humanitarias. El transporte de alimentos de WFP a muchas comunidades vulnerables se ha visto afectado, particularmente en las carreteras entre Puerto Príncipe y Artibonite y hacia el sur de Haití.
“A pesar de estos desafíos, estamos comprometidos en garantizar la continuidad de nuestra asistencia. Es reconfortante ver que las escuelas reabren, que los niños van a sus clases, y que les podemos proporcionar una comida caliente. Para las familias pobres, a menudo esta es la única comida que comen en todo el día”, dijo Barreto.
El programa de alimentación escolar de WFP brinda comidas a 300.000 niños anualmente en 1.200 escuelas de todo el país. Esta es considerada como la red de seguridad alimentaria más grande de Haití, pero solo el 60% de las escuelas han reabierto desde que comenzaron las protestas tres meses atrás.
Para llegar por carretera a zonas de acceso difícil o imposible, WFP lanzó una operación aérea a finales de noviembre. Un helicóptero Mi8-AMT transportará carga y personal de toda la comunidad humanitaria. Puede llevar hasta 22 pasajeros o cuatro toneladas de carga.
Para WFP, invertir en soluciones sostenibles es la clave para abordar las causas de la inseguridad alimentaria en Haití. WFP incrementó significativamente su apoyo a la agricultura local para así alinearse con los planes del Gobierno de revitalizar el sector agrícola como un medio para enfrentar la inseguridad alimentaria.
Video en alta definición disponible aquí
Fotos disponibles aquí