Bolivia: el pescado es el menú del día en comunidades guaraníes
Fotos: WFP/Elio Rujano
El río Pilcomayo es simplemente impresionante. Nace en el altiplano boliviano para luego recorrer más de 1590 kilómetros por tres países: Bolivia, Argentina y Paraguay. Además, es fuente de agua y alimentación para las comunidades indígenas guaraníes de la zona, entre ellas Tentaguasu, en el departamento de Tarija.
El clima errático ha afectado los cultivos de maíz y sandía, que son el sustento de los pobladores de Tentaguasu (que significa “casa grande” en español). La situación ha obligado a los hombres a migrar a pueblos cercanos para trabajar en el jornaleo o en la albañilería. Un par de veces al mes regresan a sus hogares con dinero para los alimentos de la familia. Las mujeres se han volcado a tejer artesanías con hoja de palma para generar ingresos.
Si bien el caudal del río ha mermado y así la cantidad, los guaraníes siguen pescando sábalo, un alimento tradicional que no puede faltar en la mesa.
Primero se limpia el pescado de escamas, extraen las vísceras y lo parten a la mitad.
Seguidamente lo enjuagan con agua para limpiar la sangre y las escamas. Solo le agregan sal para sazonarlo. No hay agua potable en la comunidad. Normalmente las lluvias o el río son la fuente de agua para consumo.
Luego las dos mitades del sábalo se arrojan al aceite caliente en el fogón. Se cocina bien por ambos lados y luego se sirve con arroz u otro acompañante.
El sábalo también se sirve asado, se puede hacer relleno con papa o cebolla o en sopa, pero por lo general se fríe en aceite porque se cuece más rápido. Pero el río Pilcomayo no solo produce sábalos. Hay otras variedades como el dorado (en la foto servido con arroz blanco), el surubí o el bagre.
Por su disponibilidad, el sábalo u otros pescados son servidos en el desayuno, almuerzo y cena. Las pocas gallinas o pavos que son criadas en la comunidad son reservadas para ocasiones especiales, como la Navidad.
Otras comidas y bebidas
Otra comida que se sirve con el sábalo es la sopaipilla, que se prepara con harina de trigo, azúcar, sal y levadura para el crecimiento de la masa). La masa se estira con las manos hasta dejarla circular y luego se fríe en aceite caliente.
Las comidas, en especial el desayuno, pueden acompañarse con yerba mate. Esta bebida se sirve con agua caliente y se le agrega azúcar. En la foto, Mercedes Busto lo toma en su guampa y con una bombilla.
Una bebida popular es la chicha kawi, hecha de maíz, que se consume en Bolivia y Perú. La profesora Raquel Bustos nos la muestra.
En los desayunos también se come maíz tostado y molido. Se le agrega un poco de azúcar para el sabor y se acompaña con yerba mate caliente. En la foto de la izquierda, Roli (12) muele mientras su mamá Fabiola Murillo y su hermanita Estefani (2) observan. Brian (6) come su desayuno.