Esta estrategia busca adecuar la política corporativa de género 2022 a las condiciones y realidades de América Latina y el Caribe (LAC). Para ello se identifican prioridades programáticas y enfoques operativos que permitirán a las oficinas de países generar cambios hacia relaciones de poder más equitativas entre los beneficiarios y las beneficiarias, entre personas y comunidades, y entre personas, comunidades e instituciones.