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WFP hace un llamado urgente a invertir en la prevención de la desnutrición aguda mientras líderes se reúnen en la Cumbre Nutrition for Growth

Foto: WFP/Mohammad Hasib Hazinyar. Una madre con su hija llega a la clínica de Bagrami, que cuenta con el apoyo de WFP en actividades contra la desnutrición. Ha traído a su hija desnutrida para recibir el apoyo de WFP y suplementos nutricionales. Kabul, Afganistán.
ROMA – Mientras líderes mundiales y expertos se reúnen en París para la cuarta Cumbre Nutrition for Growth (Nutrición para el crecimiento), el Programa Mundial de Alimentos (WFP, por sus siglas en inglés) hace un llamado a poner mayor atención y tomar medidas urgentes para prevenir la desnutrición aguda, la forma más mortal de desnutrición, antes de que sus impactos potencialmente letales afecten a los niños. Actuar antes de que la desnutrición se arraigue es crucial.

La desnutrición causa daños irreparables al desarrollo físico y cognitivo de los niños, debilitando su sistema inmunológico, deteniendo su crecimiento y limitando el desarrollo del cerebro. A menudo, la desnutrición comienza durante el embarazo, por lo que los programas de prevención dirigidos a madres y niños en riesgo son esenciales. Actuar de manera temprana y rápida es la única forma de evitar las consecuencias de por vida que provoca la emaciación en la salud infantil.

“Debemos prevenir la desnutrición infantil antes de que se afiance”, dijo la Directora Ejecutiva de WFP, Cindy McCain. “Si no actuamos, estaremos condenando a millones de niños a una vida de sufrimiento. WFP tiene los conocimientos y las herramientas para detener la desnutrición en seco—lo que necesitamos es inversión y voluntad política”.

WFP necesita 1 400 millones de dólares para implementar programas de prevención y tratamiento de la desnutrición para más de 30 millones de madres y niños en 56 países en 2025. En 2024, WFP logró prevenir la desnutrición aguda en 13,8 millones de madres y niños mediante el suministro de alimentos fortificados, suplementos nutricionales densos, transferencias de efectivo o cupones para comidas nutritivas y canastas de alimentos adecuadas nutricionalmente. Además, la agencia ayudó a 14 millones de personas más a través de sus programas de tratamiento de emergencia de la desnutrición.

La desnutrición está aumentando en todo el mundo debido a una ola implacable de crisis globales, incluidos conflictos, inestabilidad económica y emergencias relacionadas con el clima: en los 15 países más afectados por la desnutrición, 33 millones de niños sufren emaciación.

“La Cumbre Nutrition for Growth es una oportunidad clave para garantizar un mejor futuro para millones de niños”, dijo la Directora Ejecutiva McCain. “Los gobiernos, donantes y socios deben actuar e invertir en nutrición ahora—un niño sano hoy significa un mundo más fuerte y resiliente mañana. WFP se ve obligado a tomar decisiones difíciles, priorizando el tratamiento sobre la prevención, lo que significa que solo podemos ayudar a los niños cuando ya están enfermos. Con una financiación flexible y predecible, podemos actuar a tiempo, romper este ciclo y salvar más vidas”.

Sin financiación urgente, WFP se verá obligado a suspender programas de prevención en países con algunas de las cargas más altas de desnutrición infantil. En Afganistán, por ejemplo, los programas de prevención cesarán en mayo, mientras que en Siria y la República Democrática del Congo se reducirán a partir de junio si no se reciben fondos adicionales. En Yemen, donde hasta un tercio de los niños menores de cinco años presentan emaciación, WFP solo ha podido implementar un programa de prevención en un distrito en los últimos 12 meses—y este finalizará en mayo si no se asegura nueva financiación.

La desnutrición es responsable de la mitad de todas las muertes entre niños menores de cinco años. Para quienes sobreviven, reduce su capacidad de aprender, trabajar y prosperar en la adultez, atrapándolos en un ciclo de pobreza y mala salud.

Invertir en la prevención de la desnutrición durante los primeros 1 000 días de vida mejora la salud individual y fortalece las economías: los países de ingresos bajos y medios pierden en promedio el 10% del PIB debido a la desnutrición, a través de mayores costos de atención médica y menor capital humano. Los programas de prevención también reducen la presión sobre los programas de tratamiento, asegurando que los recursos lleguen a quienes ya sufren desnutrición.

Notas para los editores:

Material audiovisual en calidad de difusión disponible aquí:
https://multimedia.wfp.org/Share/3ic88u7kg7880rr4g3w4s48daf70bar7

Paquete fotográfico en alta resolución disponible aquí:
https://multimedia.wfp.org/Share/265j71n30o6mw8ac3kxan04f1ypgr26o

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El Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas es la organización humanitaria más grande del mundo, que salva vidas en emergencias y utiliza la asistencia alimentaria para construir un camino hacia la paz, la estabilidad y la prosperidad para las personas que se recuperan de conflictos, desastres y del impacto del cambio climático.

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