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Ecuador: PMA y GAD trabajan juntos para que la niñez de Santa Elena se alimente mejor

LA LIBERTAD– La Representante en el Ecuador del Programa Mundial de Alimentos de Naciones Unidas (PMA), Deborah Hines, visitó localidades de Santa Elena con un equipo técnico del Gobierno Autónomo Descentralizado de la provincia. En esta visita se revisaron los próximos pasos que aseguren un eficiente inicio del proyecto conjunto para mejorar la alimentación de las niñas y niños de edades entre 6 meses y menos de tres años de familias que viven en extrema pobreza en Santa Elena.

Los aliados del PMA y el Gobierno de Santa Elena en este esfuerzo son las asociaciones de pequeños productores, en especial mujeres. Sus alimentos producidos localmente se podrán canjear con el cupón del PMA para que las familias consuman productos frescos y diversos en sus dietas. Así se promueve la producción local de alimentos orgánicos, sanos y nutritivos, y las asociaciones tendrán un nuevo mercado y podrán tener mejores ingresos.



Las familias con niños de 6 meses a menos de tres años que viven en situación de pobreza extrema recibirán un cupón del PMA que podrán canjear por alimentos nutritivos. También recibirán capacitación en nutrición, para que sepan cómo combinar mejor los alimentos, cómo manejarlos adecuadamente y cuáles son las mejores prácticas de higiene. El proyecto incluye también huertos familiares, desparasitación, acceso a agua segura y mejora de pisos en los hogares.



A más de mejorar las capacidades locales para la seguridad alimentaria y nutricional, el énfasis del PMA es empoderar a las mujeres para que tomen decisiones sobre temas nutricionales y de producción. En muchos casos ellas enfrentan solas las responsabilidades familiares, incluyendo las agrícolas. En todas sus acciones, el PMA promueve la reducción de la violencia de género.



A partir de este proyecto, el PMA hará una evaluación de impacto con la Facultad Andina de Ciencias Sociales (FLACSO) para medir los cambios en la diversidad de la dieta, en el consumo de alimentos y en los niveles de anemia de niñas y niños de Santa Elena; así como en los ingresos de los pequeños productores locales, en particular de las mujeres.