Declaración de la Directora Ejecutiva del PMA, Josette Sheeran
ROMA.-Mientras los representantes en la Cumbre Mundial sobre la Seguridad Alimentaria debaten en torno a las medidas urgentes para contrarrestar el hambre, debemos movilizar a los ciudadanos del mundo - no sólo a los líderes globales- para alimentar a las más de mil millones de personas que padecen hambre en el mundo.
Hoy en día, casi una de cada seis personas en el planeta se despierta sin la certeza dr que tendrá lo suficiente para alimentarse. Estas son las personas más vulnerables y sin voz en el mundo –familias pobres con hambre sufriendo el impacto prolongado de los precios de los alimentos, la crisis financiera mundial y el aumento en la frecuencia de los desastres causados por el cambio climático, como las sequías y los huracanes.
La seguridad alimentaria no es sólo una cuestión de asistencia humanitaria y desarrollo agrícola; es un asunto de seguridad nacional, paz y estabilidad. Sin alimentos, las personas se rebelan, emigran o mueren. Esta es una cuestión de extrema urgencia para nuestra generación, y ya nos encontramos en la encrucijada. En este momento tenemos que unir a todas las naciones, todas las personas y todos los recursos para erradicar el hambre.
Mientras el número de personas que padece de hambre continúa en aumento, los recursos son insuficientes para cubrir las necesidades. Los donantes tradicionales han sido muy generosos - especialmente durante la crisis financiera mundial, la cual ha perjudicado a la gente incluso en los países más ricos del mundo. Pero nuevos gobiernos donantes y todos los ciudadanos del mundo debe hacerse presente para cerrar esta brecha. Al comienzo de la Cumbre Mundial sobre la Alimentación, el PMA se dirigió al mundo con "Mil millones por mil millones", nuestro primer llamado a los ciudadanos en Internet a través de http://www.wfp.org/, para que todos participasen en esta lucha contra el hambre.
Más de mil millones de personas pasan hambre, pero también más de mil millones de personas están en la Internet. Si cada persona diera tan solo US$ 1,50 o € 1 por semana, las personas que carecen de alimentos tendrían lo suficiente para comer.
El éxito de esta cumbre – o de cualquier reunión de este tipo- se mide en si habrá un menor numero de personas con hambre para cuando se vuelvan a reunir. Todos debemos asegurarnos que las personas con hambre puedan comer hoy- y que a su vez sean capaces de poderse alimentar por sí solos el día de mañana. Es hora de actuar.