Declaración de Directora Ejecutiva del PMA, Josette Sheeran, sobre Haití
No hay palabras para describir la devastación que ha causado el terremoto del 12 de enero en Haití. Muchas partes de la capital, Puerto Príncipe, están peor que una zona de guerra. Después de estar dos días en la ciudad, he visto la intensidad del dolor y de las enormes necesidades que este terremoto ha dejado.
Esta es la operación más compleja que el PMA haya puesto en marcha. Toda la infraestructura de la cadena de suministros de Haití ha sido destruida, por lo que arrancamos desde cero con esta operación.
El PMA está enviando alimentos a los más afectados a través de cinco corredores. El foco inicial de nuestra respuesta, que comenzó 24 horas después del terremoto, fueron los grupos más vulnerables, especialmente mujeres y niños. Nuestra capacidad de expandir la operación crece día a día. El viernes entregamos cerca de 2 millones de comidas, un aumento significativo en comparación con las 1,2 millones de comidas del jueves. Estamos haciendo nuestro trabajo, aun cuando deseamos hacer más y más rápido.
En mis conversaciones con el Presidente y el Primer Ministro de Haití, la Misión de las Naciones Unidas en Haití (MINUSTAH), y otros socios como Estados Unidos y la Unión Europea, me ha alentado encontrar una verdadera cooperación y coordinación. Esto nos permitirá a tejer juntos la operación en las próximas semanas para garantizar que cada haitiano que necesite ayuda, la obtenga.
No quiero olvidarme de mi personal del PMA en Haití. El 90 por ciento de ellos ha perdido sus hogares, todos se encuentran de luto por la pérdida de amigos y seres queridos, y sin embargo han regresado a trabajar con un espíritu inquebrantable y una determinación admirable para lograr que su país se vuelva a levantar. Tuve la oportunidad de pasar tiempo con ellos, de acampar en tiendas de campaña como todos ellos, y de escuchar sus desgarradoras historias. Para ellos mi reconocimiento y mi más profunda admiración.
Mi corazón también está con nuestras agencias hermanas, las cuales perdieron a muchos queridos miembros de su personal, y aún así siguen llevando a cabo su importante labor.
Ninguno de nosotros puede calcular el costo humano de este desastre, pero una acción generosa puede ayudar a aliviar el sufrimiento. Para que el PMA pueda realizar su trabajo, necesitaremos el apoyo de la comunidad internacional durante muchos meses, y a un nivel que inicialmente nadie había previsto. Damos las gracias a aquellos que ya han aportado generosamente, el pueblo de Haití necesita de su apoyo continuo ahora más que nunca.