Noticias | 10 Enero 2017
Hace veinte años, Sarita Rivera se instaló en Lima, Perú, con sus cuatro hijos. Dejó atrás una situación familiar problemática para enfrentarse a más retos, luchando durante cuatro meses para conseguir un terreno sin agua, saneamiento o electricidad en Almirante Grau, en el distrito de Ventanilla, en Lima."Cuando vine por primera vez, todo era arena, no había servicios", explica.